El otro día, cuando jugábamos con plastilina, quedaron dos trozos grandes e informes; uno amarillo y otro rosa.
Al principio pensé en la posibilidad de transformación de una forma vaga e indeterminada en algo más sugerente. En las piezas encontré volúmenes atractivos que me iban dando pistas de por dónde poner o quitar material manteniendo el aspecto inicial que me encontré. Esta circunstancia me crea la necesidad de registrar, al igual que las pinturas, todo el proceso; desde la forma original hasta su desenlace en algo más figurativo.
El resultado fue una suerte rostros de personajes más propios de ilustraciones de cuentos o cómics.
Ilustración escultórica I
2014
Plastilina
Ilustración escultórica II
2014
Plastilina
En este enlace puedes ver otros trabajos realizados en barro:
