2014/05/22

DESPUÉS DE LA LLUVIA

He comenzado un cuadro con un formato muy aproximado a la proporción áurea. Pensado para un espacio arquitectónico de Pedro P Miralles Quiles inspirado en tales proporciones.
Intentaré ir tomando fotografías del proceso pictórico (salvo la imagen final, el resto han sido tomadas con el móvil) y al mismo tiempo escribir todo aquello que me surja durante los ratos en los que me separo del lienzo y observo.

Hacía mucho tiempo que no pintaba en color (últimamente sólo utilizaba el blanco y el negro), por lo que ha llevado más tiempo del que esperaba preparar la paleta con los tonos.
Al tratarse de un soporte lienzo, el encaje lo he realizado con pincel, seguida de una mancha genérica:




Observando las nubes me asalta una duda... Podría pintarlas buscando un patrón: con un color local (medio) al que sacarle luces y añadirle sombras con tonos sacados a partir de aquél. La sensación de volumen sería evidente, pero no dejaría de ser una fórmula cuyo fin se encuentra en el resultado mismo; en la representación de la realidad. Y aunque el referente tiene un alto grado icónico (fotográfico) la idea no es la imitación de esa realidad sino la propia pintura.


A modo de conclusión o curiosidad diré que me he enfrentado a un reto y a un obstáculo. Mi profesor de Taller de pintura, D. Pedro Esteban, nos comentaba que en paisaje, en concreto en el cielo, no encontramos verde en la transición entre el amarillo y el azul. Y para un daltónico que tiene dificultad en distinguir el par rojo - verde, este género es uno de los más complicados, pues casi se podría decir que la naturaleza es verde por definición.
He necesitado mucho cálculo mental y ayuda para conocer de qué color era algunos de los tonos que estaba mezclando. Este es el resultado final:


Después de la lluvia
2014
Óleo sobre tela
162 x 97 cm